Una amistad a prueba de roedores: "40 segundos de diámetro"
En el corazón de Palermo, más precisamente en Espacio Polonia (Fitz Roy 1475 – CABA), los domingos cobran vida con una propuesta teatral que desafía cualquier expectativa. "40 segundos de diámetro", una creación de Víctor Chacón, nos sumerge en una pesadilla caribeña que funciona como laboratorio de la condición humana.
La premisa resulta tan disparatada como fascinante: tres amigos varados en una isla minúscula del Caribe, asediados por una invasión de ratas del tamaño de caniches. Lo que podría ser el argumento de una película B de terror se convierte, bajo la pluma de Chacón, en una reflexión mordaz sobre los vínculos masculinos y sus fragilidades.
Chacón, formado en la Escuela de Teatro de La Plata y con estudios en letras y dramaturgia, demuestra su madurez como creador en esta pieza inspirada en hechos reales. Su experiencia como docente y su reconocimiento en festivales como FeDras y TeVi se traducen en un texto sólido que navega entre el absurdo y la profundidad emocional.
La estructura dramatúrgica alterna con maestría el presente angustiante de la isla con los recuerdos que emergen como refugio mental. Esta dualidad temporal enriquece la propuesta, permitiendo que conozcamos a Marce, Leo y Gaby más allá de su situación límite actual.
El trío actoral conformado por Luis Gritti, Javier Medina e Ignacio Pozzi entrega performances de notable calibre. Cada uno logra equilibrar el registro cómico con la desesperación creciente, creando personajes creíbles en circunstancias increíbles. Sus monólogos funcionan como ventanas al pasado compartido, ofreciendo respiro emocional antes de volver al caos presente.
La dirección de Chacón aprovecha inteligentemente las posibilidades del espacio escénico, mientras que el diseño sonoro merece mención especial por su capacidad de generar tensión y hacer presente la amenaza invisible de los roedores.
Pero "40 segundos de diámetro" trasciende su premisa extravagante para convertirse en un espejo de las masculinidades contemporáneas. Esa camaradería aparentemente inquebrantable, construida sobre chistes inoportunos y silencios cómplices, se fractura cuando la supervivencia está en juego. La obra sugiere que la adversidad no siempre une; a veces revela las grietas que ya existían.
El humor negro impregna cada situación, evitando que la obra caiga en el melodrama o la solemnidad. Incluso en los momentos más desesperantes, la ironía mantiene al espectador en una zona de incomodidad productiva, entre la risa y la inquietud.
Con un final que rehúye los lugares comunes del happy ending, "40 segundos de diámetro" se consolida como una propuesta arriesgada y lograda. Es teatro que entretiene sin subestimar a su público, que divierte mientras interpela.
Una obra que confirma el talento de Víctor Chacón y que encuentra en sus intérpretes los aliados perfectos para una aventura teatral memorable. Imprescindible para quienes buscan propuestas originales en la cartelera porteña.
★★★★☆
"40 segundos de diámetro" se presenta los domingos a las 20 h en Espacio Polonia (Fitz Roy 1475, CABA).